13.08.20. Propuesta de reflexión del Área de Comunicación @MadreCatalina, Hnas. Esclavas del Corazón de Jesús. Entrega N° 2
En Agosto estaremos poniendo luz sobre un tema clave y más en el contexto de la pandemia la “Reparación”. La propuesta es dejarse iluminar y profundizar acerca del carisma de Amor y Reparación, don y tarea para vivir el Evangelio como familia de Madre Catalina. Y compartirlo, para que el bien se multiplique y se contagie la creatividad reparadora.
“La reparación necesita de la compañía de Otro y de otros”. Este viernes nos detendremos a mirar la reparación desde la dimensión social, de la necesidad que como humanos tenemos de contar con otro que sea sostén en mi proceso reparador.
En el proceso de reparación necesitamos de otros, no podemos “auto-repararnos”, pues es difícil separar el daño objetivo de la experiencia de ser herido. Oscilamos entre la tendencia a minimizar el dolor sufrido y la exacerbación de lo padecido, por tanto necesitamos del reconocimiento de otros para objetivar, para dejarnos reparar.
Además, como el daño al que nos referimos remite originariamente a la ruptura de relaciones constituyentes (consigo mismo, con otros significativos, con la sociedad), reparar y dejarse reparar involucra el consentimiento de dos libertades. (Carolina Montero Orphanopoulos aci, “Vulnerabilidad, reconocimiento y reparación” Pg. 136-137).
La reparación es un proceso interior que necesitamos transitar junto a la compañía de otros que son testigos y nos ayudan a confrontar lo padecido y cómo esto sigue afectando nuestro hoy. Son quienes nos ayudan a poner palabras, objetivar las experiencias, expresar los dolores más profundos.
El Corazón de Jesús nos dice “Vengan a mi” “¿quieres curarte?”, el se ofrece como compañero, confidente, en Su amor toda herida es acompañada, nombrada y reparada. Reconozcamos su Presencia en las personas que Él pone en nuestra historia para ayudarnos a reparar nuestras vidas.
Dispone unos minutos de este día para ponerte frente al Corazón de Jesús e invítalo a elaborar juntos:
• Una lista de aquellas personas que te acompañaron en algún proceso reparador en tu vida.
• Una frase, texto bíblico que te ayuda a encontrarte con Jesús frente a tus heridas.
• ¿Qué herida, situación, relación siento que hoy tengo que reparar? ¿Qué persona podría ayudarme a empezar con este proceso?.