14 de noviembre de 2017- Córdoba, Argentina.
Cecilia nos cuenta la gracia que recibió de Catalina de María:
“Mi afección eran intensos dolores de cabeza desde la zona frontal derecha hasta la nuca. Me recetaron anteojos e indicaron una tomografía, no se detectó el problema, los dolores seguían. En diciembre 2015 en consulta al oculista detectaron pérdida total de la visión del ojo derecho en menos de un año. Me indicaron una resonancia magnética en la que se me informa un tumor en el nervio óptico derecho compatible con un meningioma que se extiende desde el interior de la cavidad ocular hasta 3 mm antes del quiasma óptico. La compañía y oración de familiares y mis amigas del Colegio De María, fue mi contención y mi guía.
Con la protección y el amparo de Catalina de María, todo se esclareció y estamos seguras que ella decidió el tratamiento, los médicos, el lugar, ya que las opciones eran contrapuestas: cirugía tradicional o radioterapia, Córdoba o Buenos Aires, y lo principal, los profesionales en quienes confiar. La presencia de Madre Catalina se evidenció en los momentos más difíciles.
Mónica compañera desde primer grado, le comentó a su cuñado mi caso, y él se ocupó de referenciar al neurocirujano, que me propuso esperar, y en tres meses repetir los estudios, dada mi inseguridad; y al médico radioterapeuta, en el que confié”.
Mónica comenta que “el grupo de amigas de Cecilia, le pide a la Madre Catalina de María Rodríguez, por la sanación de Cecilia”.
Continúa Cecilia: “Rezábamos la oración pidiendo la Beatificación de la Vble. Catalina de María. Mónica pasó por el Colegio De María y en un pasillo se encuentra con la Hermana Emma, que sabía de mi caso, le entrega la Reliquia y unas estampas con la oración para que pidamos la gracia. Esto fue en julio que recibo la Reliquia de la Madre Catalina y comienzo a apoyarla en el ojo afectado con mucha fe.
Llegó octubre 2016, el camino estaba señalado, pero el radioterapeuta me había atendido en un centro médico que no era el que tenía mis antecedentes, y yo quería que él me tratara… y oh sorpresa, ahora trabajaba donde estaban mis antecedentes. La Radiocirugía fue en la semana del 19 al 23 de diciembre de 2016 y llegó Navidad. Estaba muy bien y feliz. Pasaron dos meses y volví a trabajar, puedo ver mejor y sin dolor. Los estudios indicarán si se logró cerrar la irrigación de la zona y detener el crecimiento del tumor. Por ahora todo indica que estoy bien. La Madre Catalina de María me acompaña y aconseja en todo momento”.
Conoce otras gracias por intercesión de la beata Madre Catalina