Hna. Constanza Lo Sardo ecj.
17, 18 y 19 de marzo, estuvimos de Misión con el Movimiento Feu Nouveau (Fuego Nuevo, en francés) de nuestro país, Benín. Con Murielle Ahomagnon nuestra pre postulante beninesa, compartimos la misión en el paraje llamado Souaré, comunidad que acompaña semanalmente nuestra hermana Marita Barrionuevo ecj., a unos 7 km de nuestra Misión Sagrado Corazón de Kpari.
Toda una experiencia de trabajo pastoral, oración y fraternidad con 24 jóvenes, en su mayoría de la ciudad de Parakou, que estudian en la universidad, en el secundario, trabajan y/ o se preparan en distintos oficios como albañilería, costura, panadería, etc.
Las actividades compartidas fueron: la oración de la mañana junto a la comunidad cristiana, las comidas fraternas con todos lo que se acercaban a diferentes horas.
Preparamos el “Vía crucis viviente” y algunos sketches con temáticas propias de los habitantes de esta zona, que luego fueron tema de conversación en pequeños grupos.
El Vía crucis viviente
El sonido del tan-tan acompañó, desde la salida del sol hasta el ocaso todos los momentos de animación y fiesta que compartimos, una constante que ni la lluvia, ni la siesta acalorada lo pararon.
El domingo compartimos la eucaristía con toda la comunidad, a la que se sumó también la comunidad del paraje vecino, Bonwoberou. Finalizamos dando gracias a Dios, porque la misión fue una verdadera ocasión de preparación para la Semana Santa que se aproxima.
Hacer lo que ellos hacen
La mañana del sábado fue especial: en pequeños grupos, los misioneros salimos a visitar y compartir con los vecinos; la consigna fue “hacer lo que ellos hacen.
A algunos les tocó recoger castañas (fruto que se cosecha en esta época del año en la zona), a otros barrer, cocinar, llevar maíz al molino, buscar agua, recoger leña, remover la tierra, etc.
Fue una mañana dedicada a ayudar en el trabajo cotidiano, espacio en el que pudimos conversar sobre su salud, el estado de los chicos, de la familia. Y ahí en medio nuestro, Jesús bendiciendo estos encuentros.
